¿Qué vale 21.000.000 de dólares y es cómo un culo?
Fácil: El culo de Kardashian, incluso puede que, en realidad, sí sea un culo, no sé.
Ayer te hablé de él, una ocurrencia, podría haber puesto cualquier otra cosa de famosos. Pero el caso es que, como no sé cómo se escribe Kardashian, pues lo puse en la barra de Google, para copiar y pegar.
Y allí apareció: Grande, redondo, brillante, como la portezuela de una lavadora secadora tope gama.
Y ponía eso: que lo tiene asegurado por 21.000.000 de dólares.
No sé, si lo ponía, pues será cierto, no lo pongo en duda. Pero: ¿Cómo se hace eso? O sea, el culo no, y no quiero hablar ni de photoshop, ni de cirugías, ni de fajas, ni de nada de eso.
A ver, que había unas fotos de las vacaciones en México en las que el culo parece un culo normal. Perdón, normal no, me refiero a que parece un culo hecho con materiales standard (¿21.000.000 Millones? ¿En serio?)
No, lo que me pregunto cómo demonios se hace es lo de asegurarte el culo cuando no eres un político engrasando puertas giratorias.
El tema es el seguro, el condicionado: ¿Qué daños cubre? ¿Y si son daños consentidos, o al menos, imprudentes? ¿Está obligada en ciertas circunstancias de precaria iluminación a llevar luces de posición, o al menos de la gálibo? ¿Puede montar en bici con un sillín normal?...
Muchas preguntas. ¡Lo que daría por leer esas cláusulas!
Y mira que las cláusulas de los seguros debe ser de lo más aburrido de leer del mundo. Claro, es que no están escritos cómo si hubieras leído y olvidado este libro. También es cierto que el libro es para persuadir, o sea, para comunicarte, que es lo mismo. Los seguros no se escriben para eso, claro.
Bueno, el libro es este: Olvida este Libro